Esta mañana se ha nombrado al Dr. Xosé R. Bustelo como nuevo Director Científico del Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca para los próximos cuatro años. Su equipo de dirección científica está formado por los Doctores Alberto Orfao (Vicedirector de Asuntos Clínicos), David Santamaría (Vicedirector de Programas Científico-Técnicos) y María Sacristán (Vicedirectora de Actividades de Formación). El objetivo de este nuevo equipo directivo es mejorar las condiciones de investigación en el CIC y transmitir educación sobre el cáncer a la ciudadanía.
El Dr. Bustelo es Profesor de Investigación del CSIC. Ha sido investigador principal en los puestos de Assistant Professor en el Department of Pathology de la State University of New York en Stony Brook. Ha publicado 170 artículos y seis patentes, y ha sido galardonado con varios premios científicos nacionales e internacionales. En su nuevo cargo como Director del CIC, combinará su labor científica con su participación en los comités de dirección del CIBER en cáncer (CIBERONC) y de la red CSIC-Cáncer, además de otros comités científicos de institutos de investigación sanitaria.
El nuevo director del centro ha tomado el relevo de el Doctor Eugenio Santos, anterior Director Científico del CIC, que se retira de su cargo por jubilación, aunque seguirá participando en investigaciones científicas de la organización. El Dr. Eugenio asegura que el centro se queda en buenas manos, y que los proyectos del CIC seguirán su desarrollo habitual con la nueva junta directiva.
El Dr. Xosé Bustelo puso énfasis en los cuatro retos principales del Centro de Investigación del Cáncer en los próximos cuatro años:
- Se quiere fortalecer la actividad científica, renovando la tecnología disponible al alcance de los investigadores.
- Se busca establecer puentes de comunicación con el personal clínico del hospital.
- Quieren apostar por el talento joven y la formación de nuevos investigadores.
- Se quieren difundir los conocimientos del cáncer a la ciudadanía, transmitir educación sobre el cáncer.
El centro tiene veinticinco años, por lo que es necesario actualizar tanto los medios tecnológicos, como los investigadores al cargo para asegurar una buena posición competitiva en los próximos años.
Es importante transmitir a la ciudadanía que el CIC es un elemento importante de Salamanca, motivo de orgullo y sede de desarrollo científico, que no está en todas las ciudades españolas. La financiación que el centro recibe es “comparable a otros centros de cáncer españoles”, pero aún así es necesario hacer un esfuerzo por implicar a la sociedad para que el centro reciba más apoyo y mejores fuentes de financiación.
