Hoy finaliza el estado de alarma. Más de tres meses de confinamiento, con una buena dosis de sufrimiento por todas las víctimas que se ha llevado la pandemia. El presidente de la Junta de Castilla y León, el salmantino Alfonso Fernández Mañueco, ha realizado hoy una declaración con motivo del fin del estado de alarma en la que ha querido agradecer la colaboración y la solidaridad de las instituciones de la Comunidad, sus entidades locales, su tejido empresarial, sus organizaciones sindicales y su fuerte sociedad civil a lo largo de este tiempo.

Ante la nueva etapa en la desescalada que comienza ahora, el presidente ha animado a seguir siendo prudentes “porque el virus sigue entre nosotros”.

Tras recordar que el virus ha provocado mucho sufrimiento a todos aquellos que han perdido seres queridos, ha señalado que también ha afectado de lleno a la vida de todas las personas, poniendo a prueba los sistemas de salud y de protección social, que en ambos casos han estado a la altura.

 

A partir de este momento, Fernández Mañueco ha asegurado que Castilla y León va a estar a la altura, y que la Junta liderará este proceso con iniciativa y anticipación. Así, ha explicado que se acaba de poner en marcha un plan de transición a la normalidad dirigido a garantizar la seguridad sanitaria y contribuir, así, a la recuperación económica y social.

Además, ha puesto en valor la unidad existente en Castilla y León, donde acaba de suscribirse un pacto para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social en Castilla y León. Se trata de un acuerdo político, ha señalado, pero abierto a toda la sociedad para enriquecerlo.

Por último, el presidente ha afirmado que el rasgo básico de la nueva etapa no debe ser una mayor relajación, sino una mayor conciencia. Por ello, ha vuelto a realizar un llamamiento a la responsabilidad individual y colectiva del conjunto de la sociedad castellana y leonesa.