La Universidad de Salamanca viene siendo en los últimos 30 años la encargada de la formación académica de la Policía Nacional en su escuela de Ávila. Hoy se ha dado un paso más en esa formación, con la creación del Centro Adscrito Universitario de Formación de la Policía Nacional en Ávila. Ha sido presentada esta colaboración en el Salón Rectoral de la Casa Museo Unamuno. El ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, el rector de la USAL, Ricardo Rivero, y Francisco Pardo Piqueras, director general de la Policía, protagonizaban esta información, en un acto en el que estuvieron acompañados por representantes de instituciones estatales, locales, provinciales y autonómicas, además de miembros de la comunidad universitaria y de la Policía Nacional.
Destacaba Ricardo Rivero que este convenio visibiliza la colaboración que se produce entre las instituciones, concretando el trabajo realizado desde hace meses. Su primeras manifestaciones son un grado y un máster. La primera promoción de grado será de 400 estudiantes que comenzarán en octubre sus clases. La idea es una mejor formación para el cuerpo de seguridad, en la que estarán presentes los valores que distinguen a la Universidad de Salamanca desde sus inicios: el respeto a los derechos y a la dignidad de las personas. El rector agradecía a todas las personas que han hecho posible este acuerdo, el trabajo de la comunidad universitaria de Ávila, la Facultad de Derecho y los vicerrectorados de Calidad y Enseñanzas de Grado y Postgrado y Enseñanzas Propias. También ha querido el rector hacer un agradecimiento expreso a la Junta de Castilla y León por incorporar estos nuevos estudios al catálogo de titulaciones de la comunidad autónoma. Concluía el rector anotando la relevancia que tiene la formación de los cuerpos de seguridad. A mayor formación, mayor grado de cumplimiento de la ley y más calidad democrática del país.
El ministro de Interior, Fernando Grande Marlaska, destacaba el honor que para él suponía compartir este acto y este acuerdo con la Universidad de Salamanca, señalando que es sobre todo un punto de partida de una nueva etapa, para culminar los procesos de transformación ya puestos en marcha en la Policía Nacional. Mencionaba que esta institución cumplirá dos siglos de vida en 2024, que se enfrenta nuevos retos y demandas, y que es una de las instituciones más valoradas en el país. Señalaba que la formación reglada es el medio más adecuado en aras a una sociedad más democrática y moderna. Agradecía a la USAL, a la vez que declaraba que en la selección de la institución que debía ser la formadora de nuestra policía siempre se tuvo claro que debía ser una universidad pública y que la USAL era la mejor opción por su larga trayectoria formativa del cuerpo, con 30 años de compromiso institucional. Dar el mejor servicio público es la finalidad de esta cooperación que hoy se formalizaba.
En el turno de preguntas, tanto rector como ministro, respondían a diversas cuestiones que aclaraban el contenido de estos nuevos estudios y la estabilidad que supone el convenio en la relación académica entre la USAL y la Escuela de Policía.
El grado en Estudios Policiales ya está conformado, y comienza con 400 oficiales este mes de octubre. El máster en Seguridad y Función Policial comenzará en 2023. En perspectiva hay tres nuevos másteres, según aclaraba el ministro.
