El director gerente de la Fundación General, y la directora de la Agencia Estatal de Investigación, han presentado una nueva edición del ‘Ágora del CENIE’, una charla sobre el nuevo Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2017-2020.
La Agencia Estatal de Investigación tiene como fin la promoción de la investigación científica y técnica en todas las áreas del saber mediante la asignación eficiente de los recursos públicos, la promoción de la excelencia, el fomento de la colaboración entre los agentes del Sistema y el apoyo a la generación de conocimientos de alto impacto científico y técnico, económico y social, incluidos los orientados a la resolución de los grandes retos de la sociedad, y el seguimiento de las actividades financiadas así como el asesoramiento necesario para mejorar el diseño y planificación de las acciones o iniciativas a través de las que se instrumentan las políticas de I+D de la Administración General del Estado.
El nuevo Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2017-2020, está integrado por cuatro programas estatales que corresponden a los objetivos generales establecidos de la Estrategia española de ciencia y tecnología y de innovación.
- Programa Estatal de promoción del talento y su empleabilidad en I+D+i
- Programa Estatal de generación del conocimiento y fortalecimiento científico y tecnológico del sistema I+D+i
- Programa Estatal de liderazgo empresarial en I+D+i
- Programa Estatal del I+D+i orientada a los retos de la sociedad
Óscar González Benito, El director gerente de la Fundación General, quiso hablar de los objetivos de este nuevo plan.
Maria Villegas Gracia, directora de la Agencia Estatal de Investigación, ha dedicado unas palabras respecto a la estructura de la agencia y sobre sí sufren las consecuencias por el cambio de ministerio.
El objetivo de este Plan Estatal es favorecer la incorporación y formación de los recursos humanos en el I+D+i, fortalecer el liderazgo científico y las capacidades del sistema del I+D+i y activar la inversión privada en I+D+i y las capacidades tecnológicas del tejido productivo, entre otros.
Por Soraya Lázaro