Es como la novela de Michael Ende pero sin ninguna poesía ni magia. Más bien es una historia de desencuentros y de enfrentamientos, incluso entre amigos y vecinos. Es la historia de la mina de uranio de Retortillo. El tema hace ya tiempo que llegó a los tribunales y a los foros políticos. La noticia estos días es que Stop Uranio pide a los partidos políticos presentes en las Cortes de Castilla y León, que han cuestionado el proyecto de minería de uranio en Salamanca (PSOE, CIUDADANOS, PODEMOS, UPL) que apoyen la Proposición No de Ley (PNL) que se va a presentar instando a la Junta de Castilla y León para que declare la caducidad de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto de minería de uranio en Retortillo (Salamanca).
Ya el Ayuntamiento de Villavieja de Yeltes solicitó a la Junta de Castilla y León que declarase caducada la DIA de ese proyecto al haber transcurrido sobradamente los 5 años que tenía para ejecutarlo. La Junta de Castilla y León sostiene que no ha caducado al haber iniciado las obras con el desvío de la carretera comarcal SA-322 y la realización de un vallado perimetral. La plataforma Stop Uranio sostiene que no se puede admitir que unas obras declaradas ilegales por el Ayuntamiento de Retortillo puedan revestir de legalidad una disposición de la Comunidad Autónoma.
Hemos hablado con un representante de Stop Uranio, Gabriel Risco.