Ha sido la idea motriz del discurso del presidente de Ecuador, Lenín Moreno, al recibir la Medalla de la Universidad de Salamanca. El ser humano está diseñado para cambiar y para el cambio es importante que haya personas que trabajen en el conocimiento, que establezcan principios, leyes, categorías, metodología para ese cambio social necesario. 

IMG_1408

El discurso del presidente ecuatoriano estuvo lleno de alusiones a la ciencia, a los valores, la modernidad. Declaró su admiración por la Universidad de Salamanca haciendo referencias a Fray Luis, Bartolomé de las Casas y Unamuno. También habló de Venezuela y de su apoyo a Juan Guaidó que entiende la mejor opción ante el hartazgo de los pueblos de caudillos que se perpetuan en el poder y excluyen a gran parte de la comunidad y que reclaman la posibilidad de pensar diferente, de aportar otras soluciones.

Los valores fueron otro hilo conductor de su discurso. En el respeto, la tolerancia, está la respuesta adecuada a la competencia dura y al egoismo, conceptos que no caben en una sociedad avanzada. La modernidad exige solidaridad, respeto, austeridad, conservación y colaboración. Declaraba que estamos ante un mundo nuevo y que debemos cambiar para mejor, hacia la potencialización de los valores.

Al comienzo de este acto era una estudiante de Ecuador en Salamanca (la comunidad más numerosa, con 196 estudiantes), Paulette Chamorro, quien tomaba la palabra y recordaba el terremoto de su país en 2016, hecho que tuvo mucho que ver con su idea de salir, estudiar en Salamanca. Su estancia en Salamanca que la motiva y la prepara para regresar a su país y promover el cambio.

El  Secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, resaltó las excelentes relaciones entre España y Ecuador, “que viven la vida como hermanos”. De Laiglesia recordó que un tercio de los estudiantes ecuatorianos que deciden salir a estudiar al extranjero lo hacen en España, un país donde ya residen más de 400.000 personas de aquella nacionalidad.

El rector, Ricardo Rivero, también tuvo un recuerdo para Venezuela y Nicaragua (“que recuperen pronto su democracia y se respeten sus derechos”). Presentaba a Lenín Moreno como estadista, resaltando su sencillez, su perfil humano, su cercanía a los sufrimientos y contrariedades (“que son los que nos forjan como personas”), su poder de superación mediante el esfuerzo y la educación. Le daba las gracias por su contribución a la democracia.

Fernando Almaraz, secretario general de la Universidad, daba lectura al Acuerdo que ha hecho posible esta concesión de la Medalla de la Universidad, el mayor galardón que otorga esta Universidad.

El Aula Salinas del Edificio Histórico estaba ocupada por numerosas autoridades, miembros de la comunidad universitaria, medios de comunicación, y estudiantes. Algunos de ellos, los ecuatorianos, habían disertado previamente con el Presidente. Un poco antes fue recibido por el rector, el secretario de Estado y el alcalde de Salamanca.

IMG_1370

Finalizaba el acto con el Gaudeamus Igitur del Coro de la USAL.