No debería olvidarse el trascendental papel que ha tenido la Universidad de Salamanca en el nacimiento de la Edad Moderna, en la articulación del pensamiento humanista y, en general, en la formulación de ideas y doctrinas que nos han situado a la vanguardia del conocimiento como base de la convivencia en paz, en la discusión de las ideas como forma de avanzar y en el pensamiento crítico como palanca para la construcción y el desarrollo de las sociedades civilizadas. Hoy nos lo ha recordado José Luis Blanco, “el eterno estudiante de la Universidad de Salamanca” en su programa “Pasear la USAL”. Como siempre un reto: una biblioteca electrónica relativa a la Escuela de Salamanca, y dos paseos, uno de El Cabaco a la Peña de Francia, otro por los conventos y monasterios de Salamanca.