Se ha presentado la Clínica Jurídica de Acción Social, un espacio de aprendizaje basado en la experiencia directa con ONGs y entidades involucradas en la defensa de los colectivos más vulnerables de la sociedad.
Ricardo Rivero, decano de la Facultad de Derecho, ha presentado esta nueva idea acompañado por Ana Pérez Cepeda, coordinadora de la línea “Memoria Histórica”; Encarna Pérez Álvarez, coordinadora de la línea “Mujer y Discapacidad”, y Antonia Durán, responsable del proyecto de Innovación Docente, y los coordinadores de la Clínica, Miguel Ángel Andrés, de la línea “Consumo responsable y protección jurídica de los consumidores”; Eugenia Torijano, de la línea “Memoria Histórica”, y Carmen González León, de la línea “Menores y el uso de Internet”.
El decano se ha mostrado ilusionado con este nuevo proyecto y ha recalcado el buen funcionamiento en cuanto a transferencia de conocimientos de la Facultad de Derecho.
Antonia Durán ha definido esta Clínica Jurídica como un espacio de aprendizaje y de servicio.
Los objetivos que se han marcado son mejorar el aprendizaje activo y contribuir a la formación de profesionales críticos con el sistema y sensibilizados con la idea de justicia social.
También desde esta Clínica se pretende formar a los estudiantes en ética profesional para que afronten mejor el espacio laboral que les espera.
Ante una concepción elitista generalizada de la práctica jurídica, durante la crisis del 29 surgieron las clínicas jurídicas en Estados Unidos como una forma de consultorio gratuito coordinado por estudiantes de Derecho. De este modo, los futuros graduados se acercaban a la realidad social a la vez que ofrecían un servicio y adquirían práctica en el entorno profesional. Esta sigue siendo la esencia de estos espacios formativos, y en concreto de la Clínica Jurídica de Acción Social, con la que la Facultad de Derecho de la Universidad de Salamanca se une a las facultades pertenecientes a la Red española de Clínicas Jurídicas.